Y hoy también toca miradores, aunque no tan espectacular como el de ayer. Saliendo de Solares, pasando La Cavada y enfilando hacia Arredondo hay que cruzar el puerto de Alisas, aquel lugar donde pude disfrutar de unas maravillosas clases de patinaje sobre granizo que me dejaron acongojado, con los congojes en la garganta concretamente.
Un dÃa medianamente despejado merece la pena pararse en el aparcamiento del puerto y recorrer los escasos doscientos metros que lo separan de la cima.
Aquà el mirador más cerquita, con su cartel indicador, el mar al fondo y Santander a la izquierda. Si además te llevas unos prismáticos puedes alucinar un rato largo con las vistas.
En el cartel figura una indicación de todo lo que se puede ver desde allÃ, desde Peña Cabarga al Cabo de Ajo, el monte Buciero, Laredo, Santoña y muchas cosas más. La lata de Nestea no sé si será porque patrocinan el cartel o es que antes vino el tÃpico guarro y allà mismo la dejó, como si aún no se hubieran inventado las papeleras.
En la superficie de la piedra redonda está inscrita una flecha señalando hacia el norte. Como sé que el norte magnético va variando con el tiempo, supongo que habrá algún empleado municipal o autonómico que se desplace cada cierto tiempo al mirador con una brújula calibrada y mueva la piedra para reorientarla al norte real en ese momento. La precisión ante todo y si queremos ser los mejores, tenemos que hacer las cosas no bien, si no perfectas.
Por último, en la barandilla que circunda el mirador están grabadas unas flechas con la indicación de lo qué se puede ver en esa dirección, en modo copia de seguridad por si acaso algún dÃa desaparece el cartel. Si señor, esto es calidad en un mirador y el resto que se aparte.
3 comentarios Escribir un comentario