Ya he comentado que cada vez que paso por una iglesia le hago un análisis exhaustivo a las paredes, a las figuras, a los retablos, cualquiera que me vea va a pensar que soy un estudioso del tema cuando la triste realidad es que ná de ná, tan sólo busco algo que comentar por aquÃ. Un ejemplo, figuritas en un retablo con una paloma tirándose en picado hacia el que está recibiendo la bendición. Menos mal que es una paloma, si llega a ser una gaviota viguesa ya podÃan tirarse todos cuerpo a tierra para conservar la integridad fÃsica, que menuda mala leche tenian aquellas pajarracas. Aún lo comentaba el otro dÃa con la parienta, las gaviotas cántabras ni son tan agresivas, ni se les da por irse a picotear a las mesas de las cafeterÃas o destripar bolsas de basura como habÃa visto hacer a las gaviotas viguesas.
Otro retablo que me deja boquiabierto. Mientras las unas bañan al niño… ¿qué es eso que están haciendo los dos de detrás? Pensándolo bien igual es la representación de un nacimiento, unas lavan al recién nacido y el de detrás presta atención a la que acaba de dar a luz. Pero claro, a primer golpe de vista viendo unas lavando un niño y una pareja en la cama, lo primero que te viene a la cabeza siempre son maldades…
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