Españoles, españolas, lectores del blog todos, y demás seres que pululan por internet, el señor buho de Cabárceno y yo aprovechamos que es el último dÃa del año para desearos un feliz fin de año y un inmejorable año 2015, cosa que por otro lado probablemente no sea demasiado difÃcil.
El señor Cárabo opina que lo mismo, pero es tan callado y serio que cuesta sacárselo.
Esta águila me imagino que también, claro que estaba unos metros mas allá la cuidadora que les da de comer asà que no le hacÃa ni caso al resto del mundo.
Aaaaaay, que voy a Cabárceno y me pierdo, cómo me gusta todo el bicherÃo y lo que disfruto con la cámara. La última vez pillé a los monos al atardecer, entre esa luz iluminando la pelambre justo de lado y que estaban todos apiñados aseándose me volvà para casa con un lote enorme de retratos de simios.
Otro al que vi de nuevo fue al rinoceronte nacido el año pasado, que ya tiene un tamañito más que respetable. Dentro de poco medirá más o menos como su madre.
Nada que ver con las dimensiones del año pasado cuando era casi un recién nacido. Fijaros qué diferencia.
Pues eso, que feliz despedida de año, no abuséis de los percebes, los langostinos y el champán, y a pesar de la más que cantada y lenta muerte de los blogs a manos de Facebook y otras redes sociales, espero que nos sigamos viendo por aquà otro año más.
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