Camino de Potes algo tan irrelevante como un nido de golondrinas trajo un montón de recuerdos a mi cabeza. Vi una iglesia y me paré a ver si habÃa algo interesante que retratar. Poca cosa.
Pero en el interior habÃan anidado las golondrinas. Algo que a mi, con lo que me gustan los bichos, siempre me pareció muy bonito…
…siempre y cuando aniden en casa ajena porque muy bonito, muy bonito, pero debajo del nido pasa lo que pasa. En mi casa de Galicia, la planta baja era garaje, almacén, loft para perritos y tendedero, todo a la vez. Para que los perros entraran y salieran a su gusto tenÃamos una puerta siempre abierta, por ella un año se colaron una pareja de golondrinas y en una viga del interior anidaron. Justo encima de donde tenÃa el tendedero. Y claro, yo, amigo de los animales, allà las dejé. Imaginaros la gracia que hace tender un dÃa la ropa y encontrarla llena de «regalos». Una y no más, santo Tomás.
