Camino del parque natural del Saja según se va, o despúes del parque del Saja según se viene, hay un pueblito llamado Ruente donde además de un par de restaurantes con muy buena pinta está el nacimiento de la Fuentona. Entrando hacia la parte de atrás del pueblo hay un pequeño parque. Parque, arbolitos y otoño, fuente de fotos asegurada.
Y también un puente cruzando el riachuelo que mana de la montaña un poquito más adelante. Sorprendente que surge unos diez metros más allá del puente pero con un caudal enorme, sin ir más lejos se veÃa más movimiento de agua que en el mismÃsimo nacimiento del rÃo Ebro en Fontibre.
De esa pequeña cueva sale el agua. Existe un hecho curiosÃsimo y es que de cuando en cuando, y sin mediar aviso, el rÃo deja de manar porque le da la gana, quedándose el cauce totalmente seco y pillando desprevenidas hasta a las truchas, podéis leer en éste artÃculo la historia completa.
Unos minutos o unas horas después vuelve a la normalidad como si aquà no hubiera pasado nada. Ese comportamiento tan curioso y errático ha dado lugar a leyendas como que en el interior de la gruta vive una anjana que guarda el tesoro de los templarios. PodÃa haber entrado a ver si tal cosa era cierta, pero mira, en otoño mojarse los pies es resfriado seguro y como la salud no tiene precio, dejaremos lo del tesoro para otra ocasión a ser posible en verano.
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