El Lignum Crucis

Y ya que andábamos el otro día por Potes, de paso nos acercamos a Santo Toribio de Liébana por echar una ojeada y contemplar las vistas desde lo alto. Había un autobús de turistas delante de la puerta. A uno le escuché decir que tenían el «Lignum crucis» fuera para que lo viera la gente. Anda, pues mira, eso es interesante. Para quien no se sepa la historia, se supone que el «Lignum crucis» es un trozo de unos sesenta y cuatro centímetros de largo de la cruz en la que crucificaron a Jesucristo conservado dentro de una cruz de orfebrería que protege la reliquia. El que se lo quiera creer, que se lo crea, y el que no, que vea «La vida de Brian» que por lo menos te ríes un rato.

Así estaba el interior de la capilla. Allá al fondo a la derecha se ven dos personas que estaban con un monje, contemplando la cruz que tenían en una especie de cajón grandote forrado de terciopelo colorado. Una vez acabada la contemplación la metieron dentro de la cosa esa dorada del centro de la imagen.

Aquí la tenéis en primer plano. Oficialmente no se deberían poder sacar fotos, pero allí todo el mundo pegaba flashazos como locos así que un servidor aprovechando la coyuntura desenfundó la Nikon y, sin flash, eso sí, dejó constancia de la reliquia para los insignes lectores de este blog, que es lo mínimo que se merecen.

En insisto, si no la habéis visto ya una docena de veces como yo, veros «La vida de Brian«. En tiempo de crisis, toda alegría es bienvenida.