Desde el Paseo de Pereda santanderino no es la primera vez que veo un hecho curioso a la par que precioso. Cielo cubierto, abundancia de nubes grises pero por un ligero resquicio en el horizonte se cuelan los últimos rayos anaranjados de ese sol del atardecer. La luz llena las montañas de enfrente haciendo un paisaje bastante irreal con la rÃa en primer plano y en sombra, una franja de luz en las montañas y nuevamente la oscuridad en el cielo.
Por si alguien se pregunta qué es ese puntito luminoso de color rojo, es la torre del «búnker» de Solares, el CPD (Centro de Proceso de Datos) del Banco de Santander. Hay quien también le llama jocosamente «El ojo de BotÃn», ya se sabe, la gente es mala, mala, mala…
2 comentarios Escribir un comentario