Al ladito del pantano del Ebro me paré hace tiempo para sacar una foto de la nieve llegando justo hasta el borde del agua y ya de paso me encontré con ésto. Curioso, un monumento hecho con una hélice sobre una base de piedra. Vamos a ver a quien se lo han dedicado.
Foto al monumento, foto a la hélice, foto a la placa, mira por donde me voy a enterar que bajo el pantano del Ebro hay sumergido un aeródromo. Es más, en verano hasta reaparece en parte cuando baja el nivel de las aguas.
Hay hasta una plaquita notificando que la hélice fue donada por el Teniente General del Aire don Gonzalo Gómez Bayo. También hubiera sido interesante que nos contaran cómo el teniente general tenÃa la hélice, si era un modelo especial, de un avión en el que prestó servicio o al que le tenÃa un especial apego. Por mantener a raya mi insana curiosidad, principalmente.