Cerquita de Zarauz está Guetaria y allÃ, en una cuesta arriba hay un edificio acristalado en oscuro bastante modernillo. Es el anexo a un antiguo caserón, el Palacio Aldamar, y juntos constituyen el Museo Balenciaga dedicado al diseñador de moda Cristóbal Balenciaga. Lo abrieron en junio de 2011 y en su interior hay más de 1200 prendas diseñadas por él.
Como a la parienta le pirran estas cosas sé que tarde o temprano me tocará pasar por allà de visita. Igual con un poco de suerte me puedo escaquear y lo que visito es el faro en lo alto del «ratón de Guetaria«.
De todas formas lo más interesante del museo es lo que ya pasó. Echando una ojeada a la hemeroteca se ve que esto fue un museo «a la española». Según parece lo diseñó un arquitecto cubano que no tenÃa homologación para trabajar en España. Las salas de exhibición se hicieron con tal cantidad de luz natural que el sol se iba a comer los tejidos (planificación y previsión, si señor). Cuando revisaron el almacén habÃan desaparecido algunas prendas del modisto, que al parecer habÃan sido entregadas como obsequio a personas ajenas al museo. Hala, venga, a readaptar el edificio, en vez de mostrar todo sólo exponen noventa prendas que se van rotando para evitar los daños causados por la luz, y con eso se consigue que lo que iba a costar seis millones de euros acabe costando veinte. Je… para que luego los vascos digan que no son españoles. Pues el modus operandi es exactamente el mismo, que lo sepan.