Ya puestos aprovecho para largar otra de Segovia y asà voy liquidando el material correspondiente a ese viaje o esto es el cuento de nunca acabar. Cuando nos Ãbamos intenté encontrar la salida de la ciudad en dirección norte y, como no, me perdÃ, pero la suerte me acompañó porque tras dar una vuelta bastante grande aparecà en un alto de una colina justo enfrente de la ciudad. HabÃa una carretera estrecha, un prado lleno de cruces y toda la ciudad a mis pies, con la catedral, el acueducto completamente de perfil y al fondo las montañas ligeramente nevadas. Mereció la pena perderse, sà señor.
Como toda panorámica se ve muy pequeñita, pero pinchar en la foto y veréis lo que es detalle.