A punto de entrar en Suances encontramos un desvÃo que indicaba hacia el mirador de no recuerdo qué. Como mirador significa buenas vistas y buenas fotos, por el desvÃo nos vamos a ver qué encontramos. Lo que apareció fue un alto desde el que contemplar la RÃa de San MartÃn de la Arena, donde desemboca el rÃo Saja. Llama la atención cómo hacia el interior, el rÃo viene medio canalizado por unos espigones que dejan el centro lleno de agua y los laterales semisecos.
En uno de esos laterales aprovecharon un pequeño entrante y hala, ya tenemos puerto deportivo para aparcar el yatecito.
Esto es Suances desde lo lejos, con sus playas, su puerto deportivo y la ciudad.
Aquà algo más cerca desde unos metros más adelante, de nuevo playas, puerto, pegadito por la izquierda está el campo de fútbol y en primera lÃnea un montón de restaurantes, chiringos varios y heladerÃas donde por costumbre me doy un homenaje. En verano hartón de helados, en invierno cocido montañés cada dos por tres, no he pasado ya de los cien kilos por los disgustos que me da la parienta, de llevar una vida más tranquila acabarÃa como el muñequito de MichelÃn.
2 comentarios Escribir un comentario