No por nada en especial, si no porque al hacer la visita a toda mecha no tuve tiempo para dedicarme a la tarea que mejor se me da y de la que obtengo mejores resultados: papear. Y eso que las referencias que me han dado de la ciudad (cochinillo aparte) son de lo más jugosas, o las tentaciones que se pueden ver en los escaparates ya dejan bien a las claras que otra cosa no sé, pero el estómago hay que ejercitarlo convenientemente. De estas seis variedades del escaparate no he probado nunca ninguna, ni he catado el ponche segoviano, asà que habrá que ir buscando fecha para honrar convenientemente las especialidades de la ciudad.
2 comentarios Escribir un comentario