Pensé que ya habÃa liquidado el paseo fotográfico por Carcassonne, pero no, echando una última ojeada no pude resistirme a sacar una nueva tanda con las manifestaciones artÃsticas encontradas en la ciudad, que no son pocas ni poco interesantes. Veamos la primera. Dentro de la ciudad amurallada nos encontramos con una estatua con forma de persona y anda… menudo palitroque le han puesto a media altura, estos franceses siempre tan explÃcitos…
Otra, del interior de la fortaleza. Esta va de parejitas como cruzadas por un montón de cicatrices y con una ristra de chorizos por la cabeza. Original cuanto menos.
Las dos siguientes las vi en una esquina de la plaza de los restaurantes. ¿Esto qué vendrá siendo? ¿Una macheta de carnicero que perdió su mango?
Este ya es más facilito, un pico clavado junto a una ventana. Mola eso de sentarse en un banco, echar una ojeada a un lado y anda, mira, un pico amarillo gigante…
Ya en la parte de la ciudad «normal» habÃa un puente con aspecto de medieval. Fijaros lo que le habÃan puesto delante, un muñecote saliendo del prado con su corazoncito correspondiente.
Y éste ya es para sobresaliente… en apariencia es una casa normal, pero en realidad sólo la ventana con balcón del centro y la que tiene justo encima son de verdad. El resto, ventanas, balcones y personas, todo pintado haciendo un trampantojo espectacular.
4 comentarios Escribir un comentario