Ayer tocaba oleaje

Anteayer estaba vegetando un rato delante del telediario con el cerebro absolutamente en off. Cosa rara en mi porque lo único que veo últimamente son documentales de bichos, mano de santo contra el insomnio pasado, presente y futuro. Salí automáticamente del modo de suspensión cuando empezaron a hablar sobre la llegada de la puntita de una ciclogénesis explosiva situada sobre el Reino Unido, esos retazos de tormenta, acompañados de una marea viva, traerían olas muy grandotas y muy seguidas por el norte peninsular. Afuera llovía un montón, era tal el soporcillo dominguero mientras hibernaba cubierto por mi mantita polar que ni se me ocurrió pensar en la posibilidad de ir a sacar unas fotos al oleaje, y eso que esa misma mañana paseando por el entorno de la Playa de la Maruca ya había olas y alguna foto maja sí que salió.
Oleaje en la Maruca
Por cierto, fijaros en los Picos de Europa al fondo, menuda cantidad de nieve que tienen. Creo que se van mereciendo otra visita más.

Retomamos el asunto de la tormenta. Ayer por la tarde nos vamos con los perros a dar una vuelta por el Sardinero. Nos viene bien porque así se acostumbran a ver congéneres y aprenden que un Yorkshire no es un aperitivo, no vaya a ser que un día tengamos una desgracia. En el paseo marítimo vemos un montón de gente expectante, cámaras, fotógrafos, ¿qué habrá pasado aquí?
Grabando el oleaje
¿Que qué pasó? Que esta gente vio el Telediario con las neuronas puestas y se vinieron a disfrutar del espectáculo. Menudo oleaje, normalmente hay una franja bastante amplia entre el paseo y el agua, ayer no había nada, las olas llegaban hasta el muro del paseo y eso que creo que la marea estaba bajando.
Oleaje en el Sardinero
Por la zona de La Magdalena y la playa del Camello más de lo mismo, el mar suele estar tranquilo pero aquí batía que daba gusto contra las piedras de la península mientras olas de tamaño respetable como la que se ve a la derecha rompían contra la arena. Definitivamente tengo que hacerle más caso a los telediarios y, a ser posible, despierto.
Oleaje en La Magdalena

2 comentarios Escribir un comentario

Deja una respuesta


Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.Más información sobre las cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies