Solares, a diez kilómetros de Santander, probablemente sea conocido por dos cosas. La primera, el balneario situado casi en el centro del pueblo, bastante bonito y al que un dÃa habrá que hacerle una visita para experimentar con todo eso que ofrecen y tan buena pinta tiene, que a mi lo que tenga que ver con chapuzar y agua termal siempre me gustó un rato largo.
El otro hecho destacado del pueblo es la existencia de la embotelladora de agua de Solares, el agua que sólo sabe a agua:
Esta es la planta embotelladora, hubiera salido mejor foto si me hubiera ido a la otra punta del pueblo pero mucho me pedÃs para sacarle una foto a una fábrica asà que ya sabéis, en eso blanco de ahà en medio envasan las botellas como la de la foto anterior…