Durante las navidades pasadas leà en el periódico que el ayuntamiento tenÃa pensado adecentar y abrir para contemplación del público (vamos, hacer otro centro de interpretación más) un refugio antiaéreo de la época de la guerra civil situado en la Plaza del PrÃncipe. ¿Mande? Si por esa plaza paso un montón de veces y nunca vi nada. ¿Véis vosotros algo? ¿no? Pues yo tampoco.
A ver si va a ser esa bajada que han montado donde antes estaban las excavaciones de los restos romanos en la Plaza Porticada. Voy a echar una ojeada. Pues no, va a ser que no, esto tiene pinta de estar más abandonado que otra cosa.
Lo único de interés era ver cómo desmontaban la pista de patinaje que ponen allà durante las navidades.
Por si alguien quiere montar una en su jardÃn, se necesita una buena base de madera sobre la que colocar una superficie de tubos finos de goma por los que circula el lÃquido refrigerante. Echando agua por encima se acaba congelando y ya tienes pista de patinaje.
Unos tubos de mayor diámetro en los laterales supongo que serán los encargados de alimentar a la gran cantidad de tubos más finos de la foto anterior.
Con posterioridad salió en el Diario Montañés que el mencionado refugio de momento no pasa de ser tres tubos subterráneos de hormigón. Para la primavera se hará el proyecto, luego las obras y con un poco de suerte será visitable en otoño, salvo que los plazos sean como los del Centro BotÃn, en cuyo caso lo dejamos para otoño pero de 2016.
Partiendo de aquà me vino a la cabeza que si habÃa refugios antiaéreos es porque en Santander debió haber bombardeos. En Galicia no recuerdo haber visto nunca restos de un refugio porque creo que no cayó ni una bomba al decantarse desde el principio por el bando del tÃo Paco (véase el mapa de España a los dos meses de empezar la guerra), pero en Santander durante 1937 sà que sufrieron unos cuántos a cargo de la aviación italiana y alemana.
Seguà buscando algo más de información y me enteré cómo una curiosa construcción que suponÃa decorativa en realidad es otro refugio. Aquà se ve el Hotel Real, el «Promontorio» y debajo unos cuántos arcos.
Asà son los arcos vistos desde la Avenida Reina Victoria.
Otra vista desde el lado contrario. Esto es lo que yo creÃa decorativo o para mantener el terraplén sin que se cayera. Pues no, es otro refugio.
De paso que sacaba las fotos me fijé un poco más y evidentemente algo habÃa porque tiene varias entradas tapiadas. A ver si algún dÃa abren este también.
Hay otro más en la calle Bonifaz, justo enfrente de la Filmoteca de Cantabria.
En la pared de la derecha se ve un arco en la piedra, que no es más que la entrada tapiada y disimulada. La de veces que he pasado por delante y no me habÃa ni fijado.
Por si alguien está interesado en más información sobre la guerra civil en Cantabria hay un libro disponible en Google Books de forma gratuita, que entretenerse aprendiendo nunca viene mal.