Mientras caminaba por una de las cuestas santanderinas veo allá a lo lejos una torre con pinta de antigualla que sobresale sobre los tejados. Le saco una foto y la parienta me mira con cara de «oh, noooo…». Cómo me va conociendo esta mujer, cómo sabe que la curiosidad me puede y allá donde vea algo distinto, allá me voy a ver qué es.
Esa zona viene siendo el barrio del Cabildo de Arriba, cruzado principalmente por la Calle Alta por la que sólo pasé una vez andando desde la Plaza de México y no me quedaron muchas ganas de repetir. Todo edificios bastante avejentados, locales comerciales cerrados y pinta de necesitar una renovación total con urgencia. Pero bueno, independientemente de eso, esta torre no la habÃa visto asà que allà nos dirigimos.
Entramos en ese barrio por una subida justo frente al ayuntamiento, la Cuesta del Hospital. El aspecto general difiere poco del resto del barrio, casas antiguas, mucha ruina y solares vacÃos.
Este edificio es el número diecisiete. En la Wikipedia decÃa que era un «curioso edificio con fachada de sillerÃa, actualmente amenazando ruina, ejemplo de las viejas construcciones desaparecidas de la zona». Ah… pues vale, pero es como mi cuenta del banco: interés cero.
El de la parte de atrás no está en mejor estado. Más bien todo lo contrario, le queda una pared en pie y las ventanas, por si los vecinos inexistentes se quieren asomar por ellas. Los únicos que salen beneficiados son los de la casa marrón de la derecha, al no tener nada delante habrán ganado unas vistas y una luminosidad que ni podrÃan imaginar si llegan a construir en ese solar.
Justo enfrente otro por el estilo. Madre mÃa, le digo a la parienta de venir a vivirnos a esta calle y le da un jamacuco.
Claro que el de la foto anterior aún es mejor que este, que la casa está solamente dibujada. El interior no lo vi pero me lo imagino.
Al final de la Cuesta del Hospital encontramos un cruce que enlaza con la Rampa de Sotileza y la Calle Alta, donde se ven edificios no tan hechos polvo pero tampoco en un estado como para echar cohetes. Hay muchos con su historia. Este, por ejemplo.
Aquà estuvo la Escuela de Artes e Industrias hace 112 años ni más ni menos, como bien indica la placa superior. Las dos placas inferiores indican el nombre de la calle, una porque sà y la otra por si no habÃa quedado claro la primera vez.
Hacia el otro lado hay más edificios por el estilo, aunque por lo menos pintados por fuera y medianamente presentables. En esa esquina está el Centro de Danza Armengou, quien lo adivinarÃa viendo el dibujo de la persiana metálica.
Llamativas las instalaciones eléctricas y, como no, por aquà también pasa el Camino de Santiago. ¿Hay acaso alguna carretera, vÃa o camino por donde no pase? Es que si me llego a encontrar el cartel con la concha del peregrino mientras iba hacia la cabaña verónica ni me hubiera extrañado.