Según parece Santander se fue extendiendo hacia el sur por la zona de Nueva Montaña, la parte que queda entre la salida de la ciudad y Maliaño, cerca del Corte Inglés y bordeando la autovÃa. Cuadricularon las parcelas, hicieron calles, aceras, construyeron algún edificio, llegó la crisis inmobiliaria y parada se ha quedado la zona, con parcelas edificadas, otras a medio edificar, otras dedicadas a criadero de plumeros y una sensación rara como de abandono. Asà se ve, un edificio aquÃ, otro allá, un campo de hierba, un camino sin asfaltar que no lleva a ninguna parte y la sensación de que va para largo viendo cómo está el panorama económico.