La segunda ciudad en importancia de Cantabria es Torrelavega (Vegatower, según al Frikipedia), y bien poco la he sacado por aquà porque no sé qué pasa, que no me gusta nada. Escasos monumentos que ver, fábricas enormes (Sniace y Solvay) en la entrada, aspecto de ciudad obrera en franca decadencia, definitivamente no es santo de mi devoción.
Una de las pocas cosas monumentales que ver es la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. No es muy grande, no es pequeña, no es muy bonita, no es fea, tiene ciento y pocos años, queda en medio de un barrio normal y poco más que destacar.
La torre es lo más llamativo. Larga (cincuenta metros de altura), afilada y con esas piedras bicolores como el resto de la construcción.
Como tampoco habÃa mucho más que ver y no se podÃa entrar, me dediqué a los detallitos. Las farolas, modelo estilo «ensarta paracaidistas».
Y el rosetón, vidiera opaca modelo tablero de aglomerado y chorros de espuma aislante amarilla por todos lados. Quiero suponer que es porque lo estarán restaurando, si no, menuda chapucilla.
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