En el Pais Vasco francés les encanta el juego de la pelota y el de cesta-punta, que viene siendo parecido. ¿A qué le pueden haber dedicado entonces una rotonda? A ese deporte, por supuesto, con una cesta gigante y la pelota justo debajo. Porque no les vino la idea, que ya puestos podÃan haber hecho un puente con forma de cesta-punta y les quedaba de sacar en las guÃas turÃsticas.
Bonita, ¿eh? Ya podÃan aprender en Torrelavega. Eh, que es broma, que ya os veo venir furibundos defendiendo las rotondas torrelaveguenses…