Se necesita alegría

Eso decía el cartelito que tenían en el escaparate de una zapatería en el centro de Santander, se necesita alegría en esta época de crisis. Hombre, un trabajo y algo de pasta en el banco también ayuda, pero todo es ser optimista y como decían los Monty Phyton, siempre ver la parte brillante de la vida.

Realmente no estaría mal un poco más de alegría por todos lados, por la calle, en la gente, que con esto de la crisis se ve todo más mustio. Leí también hace unos días una entrevista a Luis Rojas Marcos en la cual decía que los españoles tenemos la particularidad de que no se habla de la felicidad, no se presume de ser feliz, mientras que en EEUU se glorifica la felicidad y la cultura fomenta hablar del tema. ¿Para qué vas a hablar de lo feliz que eres, si se lo dices a tu vecino y ves como su cara se transmuta deseando por lo menos que te caiga un avión encima de la casa o que te echen del trabajo, si no las dos cosas a la vez?