Entretenido mientras visitaba el claustro de la catedral de Santander vi a lo lejos un banco de piedra y oye, ya que está ahà vamos a estrenarlo. Según me iba acercando noté que me iba a quedar con las ganas porque a los destinados al descanso de la gente dudo mucho que les pongan ese relieve en la superficie y este más bien me tiene pinta de tapa de sarcófago asà que mejor «non meneallo» e irme a sentar a otro lado.
Giro una esquina del claustro y aparecen otros dos elementos similares aunque más trabajaditos. No sé de donde habrán salido, pero se trata de dos estatuas yacentes de esas que solÃan poner sobre las tumbas de la gente pudiente y/o famosa.
¿Que harán aqu� Porque tumba, lo que es tumba, no hay, los tienen ahà apartados en un lateral como dejan a los enfermos en los pasillos de urgencias en momentos de sobrecarga y ya vendremos cuando se nos acuerde. Mira tú, hasta me están entrando ganas de volver a visitar el claustro por ver si estos siguen allà o si al fin les han dado un destino definitivo.