Visitando Sobrellano

Comillas nuevamente, día de esos que empiezas aquí para acabar allá y ya que aparcamos al lado del Palacio de Sobrellano vamos a echarle una ojeada al interior. Este cartel me suena… aunque sin la reforma. Se ve que en verano van parcheando el cartel según toca cambiar de horario. No es que sea muy profesional, pero mira, su función la cumple de sobra.

El Palacio, como siempre, majestuoso, bonito y muy fotogénico, aunque hubo que esperar y buscar ángulo para no meter a gente en el encuadre, que ese día parecía como si regalaran algo a la puerta por la cantidad de personal que estaba a la espera.

Tarifa: tres euritos el Palacio, otros tres euritos la Capilla-Panteón. Yo ya lo he visitado hace años y merece la pena, es muy espectacular, grandioso, sólo el comienzo con las cristaleras y la escalera te asombra. ¡Cielo santo! ¡Qué leo! ¿Pero de qué va esta gente? ¿Cómo que no se pueden sacar fotos ni filmaciones en el interior? Pues mira, sintiéndolo mucho le van a dar mucha morcilla a la visita porque ya no entro, qué carajo, menuda manía están cogiendo con lo de no permitir fotos así que me niego a contribuir mientras no me dejen disfrutar de mi entretenimiento principal, y si todos hiciéramos lo mismo otro gallo nos cantaría. He dicho.