Carteles y carteles

Hace unos meses me tocó pasar por los juzgados de Santander a recoger unos papeles (nada serio, iba a justificar la tenencia y disfrute en Suiza de treinta y pico millones en moneda del Monopoly). Y ya se sabe, vaya donde vaya voy siempre con los ojos bien abiertos porque nunca sabes qué puede aparecer. ¡Anda! ¿Qué es ese papel pegado a la pared con los bordes quemados y un montón de cosas escritas?
Cartel I
Pues a juzgar por la pinta, cualquiera diría que es un soneto de Quevedo puesto ahí por alguien a quien la sentencia del juez no le resultó demasiado favorable. Suerte que no lo pillaron, porque eso de «Las leyes con que juzgas, vil cochino» debe hacer de todo menos gracia. ¿Y esa otra pegatina amarilla en una farola?
Cartel II
Mira tú, y luego dicen que no hay trabajo en España, si hasta en las farolas ofrecen puestos de masajista erótico y no es necesaria experiencia…

Deja una respuesta


Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.Más información sobre las cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies