Una de las obras importantes del patrimonio cántabro es el «crucero de Rubalcaba», que no recibe ese nombre por ser propiedad del ex-dirigente del PSOE sino por estar en el pueblo con el que comparte nombre. La mejor manera de llegar allà es ir a Liérganes, seguir en dirección sur hacia San Roque de Riomiera y el puerto de Lunada. Ni cinco kilómetros más adelante encontraremos esta explanada de asfalto delante de esta casa con escudo, la casa Miera-Rubalcaba.
El escudito está bien repleto de figurillas, casi no caben más. Forzudos, leones, angelotes, cabezas por todos lados, menudo mérito contando que por aquellos entonces estas cosas habÃa que hacerlas a mano dale que te pego con el cincel y el martillo. Si salÃa mal y se rompÃa… aaaahhhh… ¡se siente!
Yendo por el callejón que se ve a la izquierda de la casa, al final de muro que delimita la finca nos encontramos con el famoso crucero hecho más o menos allá por 1717. En Galicia un «cruceiro» era un poste de piedra con un jesucristo crucificado en lo más alto, aquà se ve que es pilar con un escudo de armas grandote.
Un par de figuras humanas lo enmarcan y un cristo pequeñito preside desde lo alto para que no falte nada.
¿Qué queréis que os diga? Yo me quedo con el escudo de delante, tiene muchos más muñequitos y luce más en la fachada. Además el crucero de Rubalcaba está orientado hacia el norte, con lo cual las tres veces que pasé por allà para retratarlo, las tres veces lo encontré o bien en sombra o bien con el sol (al sur) de frente, asà que no hay forma de fotografiarlo como yo quisiera. En cambio a la fachada y al escudo les da el sol directo y asà no veas lo que lucen. Y con esto, concluye por hoy la erudita disertación «valor patrimonial dependiendo del ángulo de la luz del sol».