Por mucho que devuelvan arena a las playas, cuando al mar le viene en gana rápidamente aprovecha para reclamar lo que es suyo y se apropia de nuevo del material utilizado en los rellenos. Véase el caso, domingo pasado, playa del Sardinero, marea alta con coeficiente de 94 (bastante altito), olas que llegan hasta el muro del paseo y van llevándose de nuevo la arena hasta las profundidades marinas.
Poquito a poquito, ola a ola iba escarbando la playa para ir recuperando todo el material que le robaron con la draga.
Ya lo he dicho más de una vez, el mar no tiene prisa y sà mucha paciencia. Por mucho que intentemos cambiar el paisaje cuando quiere vuelve a dejarlo como estaba. Esperemos que se aguante hasta final del verano por el bien del turismo…