Fracking nothing de nothing

Como ya contaba por aquí, en Cantabria hay un movimiento social contra el uso del fracking por parte de las empresas extractoras de gas del subsuelo por los perjuicios para la salud que esa técnica parece conllevar en cuanto a la posibilidad de que los productos químicos tóxicos empleados acaben en los acuíferos y finalmente en el grifo de tu casa. Para el pasado día seis de octubre había programada una manifestación en Santander:

Oh, cosa curiosa que el día cuatro, y fuera de programa, el gobierno regional saca adelante una propuesta conforme pretende prohibir esa técnica minera. Parece un triunfo, pero bueno, como dice el dicho «al freír será el reír» y de esa frase en pequeñito que dice «Aún no hay plazo de entrada en vigor» no me fiaría yo un pelo, especialmente si se trata de una aprobación express justo antes de una huelga como también parece haber apreciado la «Plataforma contra el Fracking». De todas formas seamos optimistas, con un poco de suerte pìntadas como ésta quedarán sólo como recuerdo de que primero está la gente y luego las empresas.

Para que veáis cómo son de coherentes algunos políticos, en la manifestación del día seis contra el Fracking estaba Miguel Angel Revilla, ex-presidente de Cantabria. Adivinad quien concedió un permiso para realizar perforaciones y explotaciones usando esa técnica ni más ni menos que en la zona del Saja-Nansa, mi hayedo favorito de Cantabria… bingo, el mismísimo. Hace años, cuando el hombre este daba muestras de austeridad yendo a la Moncloa en taxi y todo aquel teatrillo hasta me caía simpático. Ahora, conforme ando por aquí y me cuentan las que ha hecho me doy cuenta que es otro político más, pura fachada a la busca del beneficio propio.