En el parque donde và el bloque de la UtopÃa no sólo estaba esa obra sobre la hierba. A escasa distancia aparecÃa otro de una señora mayor con dos niños pequeños a su lado.
Esta obra rinde un homenaje a las abuelas, que en tantas familias estaban ahà para echar una mano a todo lo que se necesitara, con la casa, con los niños…
En un mundo en el que necesitan currar el padre y la madre para poder sacar una casa adelante en condiciones más o menos dignas y en el que oigo cómo me cuentan a veces casos de abuelos que incluso tienen que sostener económicamente a las familias de los hijos, la única pega es que creo que se han quedado cortos en el tamaño del monumento.