En Gijón le han dedicado una estatua a «la madre del emigrante«. Aquà en Cantabria hay otra según se llega a San Sebastián de Garabandal, aunque de diseño menos moderno. Les ruego me perdonen lo penoso de la fotografÃa pero la posición del sol en lo más alto y justo detrás me impidió alcanzar la calidad que ustedes se merecen.
Como no, placa conmemorativa en la base con unas frases bastante interesantes y la fecha de inauguración.
La paisana luce atuendo tÃpico de las aldeas, con mandil pañuelo al pelo y albarcas en los pies. La pose es la de estar echando una ojeada a lo lejos.
Efectivamente, pose de escudriñar el horizonte. ¿Qué estará viendo?
Pues eso mismo me pregunto yo, supongo que la carretera de llegada al pueblo a ver si aparece alguien conocido aunque con tal cantidad de arbolado dudo yo que se consiga ver nada. O a lo mejor está oteando ciervos, que desde hace un par de semanas es la famosa berrea y este domingo os puedo garantizar que al atardecer por allà cerca se escuchaba perfectamente el mugir los ciervos.