Eso es lo que probablemente piense esta planta de aquellos alelaos que no les importa utilizar una parte de un ser vivo como soporte para escribir sus chorradas.
Y es que machacadita tienen a la pobre. Lástima que no sepa moverse sino hasta le pegarÃa con cinta americana una estaca a otra hoja. Luego me sentarÃa a esperar que apareciera el siguiente apollardado con ganas de dejar huella. Anda que no me iba a reir ni ná cuando la planta se tomara a estacazos cumplida venganza de todas las vejaciones anteriores.