Hay ciertas señales que van indicando la cercanÃa del otoño: dÃas de calor pero noches fresquitas, ese viento del atarceder, las hojas cayendo poco a poco de los árboles o incluso esto que vimos en Bárcena Mayor: los montones de leña apilados a la entrada de las casas. La gente se va preparando ya para la inminente llegada del frÃo, aunque de otros años recuerdo ir encendiendo en casa la calefacción el 10-10 (dÃa fácil de recordar) pero esta vez parece que vamos a esperar unos dÃas más. Y que se chinchen los del gas ciudad, que para eso lo cobran a base de bien.