Me refiero a la primera visita al hayedo del Saja-Nansa, a ver cómo están esos preciosos arbolitos y si van apareciendo los colores otoñales. De momento, y al no haber llegado aún el frÃo, nada de nada de amarillos, rojizos y marrones. Esta es la vista desde el Mirador de la Cardosa. Arbolitos verdes a punta pala.
Muy poquitos han cambiado ya de color, estos de aquà son unos adelantados a la época. El resto pasan de todo y siguen disfrutando de las temperaturas tan agradables que sigue habiendo para estar casi llegando a noviembre.
Ruta mañanera entre las hayas a ver si nos encontrábamos algún ciervo, tarea que cumplimos a la perfección con nulo éxito porque los muy jodÃos lo tienen facilito para escapar de un par que arman tanto ruido al andar que se les detecta a un kilómetro de distancia. El bosque, eso sÃ, tan bonito como siempre.
Mira por donde la foto más maja del dÃa fue en el centro de interpretación del parque. Tienen un generador metido en una caseta para producir energÃa eléctrica. Caseta, hayas, sol, luz, colores, foto bucólica al canto que estas imágenes rurales suelen quedar muy apañadas.
Total, tanto rollo sólo para decir que si queréis pasar por el hayedo, mejor esperaros diez o quince dÃas para verlo en todo su esplendor.