Tranquilos, que no os voy a echar un rollo filosófico freudiano sobre el ego, el super-ego y la abuela del ego. Hoy va a la cosa de calles y palabras. Estos dÃas son muchos los que hablan o hablarán sobre la peatonalización de la calle Rubio, la calle donde está el Museo de Arte Contemporáneo de Santander (MAS). De ser la tÃpica calleja estrecha con tráfico, coches aparcados por todos lados, aceras enanas y pocas ganas de pasar por ella, fijaros en lo que se ha convertido.
Lo más llamativo son las baldosas de colores distribuidas acá y allá en medio, pero con una franja enorme justo delante del MAS.
La franja se extiende alrededor del edificio y continúa subiendo toda la calle Gravina, peatonalizada también.
Esto es en lo que se fijará la mayor parte de la gente. Como un servidor recordaba que en la fachada del MAS estaba la palabra EGO del Desvelarte 2013 fui a ver qué tal seguÃa. SeguÃa, esa es la palabra que mejor describirÃa el asunto. SeguÃa… porque ya no sigue.
Y esta es la muestra más clara y evidente que estuvo pero ya no está, las huellas del desconchón en la pared después de que alguien se lo haya llevado. Una más a la lista de las palabras desaparecidas, primero fui buscándolas a lo largo de todo Santander y mostrándolas, ahora poco a poco voy mostrando su triste desaparición a cuentagotas.
Haciendo una recopilación, «Flota» duró poco tiempo al estar en el mar, «Mulier» se fue cuando reformaron la peluquerÃa de Alex Arroyo, «Respira» llegué tarde y no la vi, a «Galaxia» se la llevó el oleaje, «Viva» desapareció con el repintado de la caseta de los prácticos del puerto y ahora «Ego» se ha ido con la peatonalización. Quedan veintiuna. A ver por cuánto tiempo.